martes, 6 de abril de 2010

capítulo 4

CAPÍTULO 4: La cita.

24 de marzo por la mañana, un día radiante para ser las 10. El cielo está despejado de nubes, el sol abrasador, que cada rayito de luz que cae sobre ti, hace que un pequeño cosquilleo recorra tu cuerpo.
Anna, se prepara para su gran cita con Scott. A pesar de que simplemente irán a la biblioteca para planificar el proyecto de ciencias, está impaciente por ir guapa. Ha registrado el armario entero y aún así, sigue sin saber qué ponerse. Su tía ha optado por dejarle un fresquito vestido, muy apropiado para la ocasión. Ni muy formal, ni muy macarra. Perfecto, ahora falta el maquillaje.
Entre risas y burlas, tía y sobrina se divierten frente al espejo, música a tope, bailoteos, sorpresas… Terminado. Anna al fin esta impecable. Se le va a salir el corazón de ilusión, alegría, vergüenza, miedo y sobre todo, excitación.

-Pequeña, estás perfecta. Valla, nunca te había visto tan radiante como hoy. Parece ser que levantarte temprano para verme, te alegra la vista-bromea Scott con una sonrisa de lado a lado.

-ja ja y tu parece ser, que sigues igual de tontorrón que todos los días, o quizá me esté equivocando.-Mientras, Anna le da un lento y delicado beso en su suave pómulo.- Bueno, ¿Qué te parece si entramos en la biblioteca? Al final, se nos hará tarde y sin siquiera haber empezado el proyecto.

Dicho esto, los dos entran mirándose fijamente a los ojos, avergonzándose por hacerlo. Aquella simple ojeada, significaba tantísimo para los dos que, les pareció eterno aquellos segundos. Es como si el mundo se detuviera a sus pies, como si nadie más que ellos existiesen en aquel momento.

-Está bien, me parece que primero, deberíamos pensar en qué proyecto hacer. Debe ser innovador y sencillo, pero a la vez debe tener su punto interesante. Tiene que ser único en el mundo, alguien al que jamás se le ocurriera semejante idea.

-Sí, estoy muy de acuerdo contigo. Pero para eso, ya deberíamos haber traído alguna idea de casa. Tendríamos que haberlo pensado antes de venir. Bueno, será mejor que pongamos manos a la obra cuanto antes.

Los chicos, se sentaron uno enfrente del otro con unos pares de buenos tomos de libros. Escribieron y tacharon ideas, algunas ingeniosas pero con poco fundamento otras inapropiadas para el trabajo. Así se pasaron horas y horas con la vista ya cansada de tanto leer y con dolor de cabeza de intentar dar fruto de su inteligencia.

- ¡Lo tengo, lo logré! ¡Ya sé cual puede ser nuestro proyecto!- mientras grita de alegría, Anna se levanta de un salto de la silla- Esta idea no puede fallar te lo aseguro. Es lo más ingenioso que se me ha ocurrido jamás. La máquina del tiempo. Sí. Nadie lo ha conseguido aún y ¿Sabes qué? Nosotros seremos los primeros en serlos.

- Ja ja ja, pero qué imaginación que tienes chica. Tendríamos que ser unos cerebritos para poder hacer todas las fórmulas que pide eso. ¿Sabes todos los años que tardaríamos en hacer eso? Puede que ni siquiera lo acabásemos. Lo siento Anna, es una buena idea pero… No nos daría tiempo. Será mejor que sigamos pensando.

- Oh, vale, está bien. De acuerdo. Qué te parece, si de un montón de proyectos juntásemos ideas e hiciésemos con ello, uno global.-Dice Anna expresando su extraña cara de concentración y orgullo.

Dicho y hecho, poco a poco los 2 jóvenes pusieron manos a la obra. Entre libros y videos, se divertían, asomando la mirada, y apartándola rápidamente para que el otro no la visualizase.
Parecían un par de sabios científicos, con aquellas blancas batas hasta las rodillas y las gafas. Se pintaban con pintura, con rotuladores, contaban chistes verdes y sobre todo, se olvidaban de todos sus problemas personales.
Las 14:30. El tiempo se les ha pasado volando, casi sin darse cuenta. No han avanzado mucho, pero sí lo suficiente por hoy.

-¡Valla! Fíjate qué tarde que se nos ha hecho, será mejor que nos vallamos a comer, o si no, ¡esta tarde será imposible de aguantarla!-se despide Anna sin borrar la sonrisa de la boca.- ¡Venga grandullón! ¡Mañana seguiremos! Te aseguro que será mucho mejor que hoy. ¡No lo dudes!

Anna hace ademán de irse cuando Scott la detiene agarrándola del brazo izquierdo.

- Anna verás quería decirte si te apetecería salir a dar una vuelta esta tarde. No sé podríamos ir al cine, o a la montaña, o a la playa, o, o, o… Lo siento. No quería intimidarte, ha sido una chorrada por mi parte preguntártelo. Cómo se me ha podido ocurrir. Está claro de que tú no querrías. - Scott se sonroja, le cuesta hasta hablar.

- Valla, es muy amable por tu parte pero… ¿Seguro que no es una tomadura de pelo? ¡Sabes que yo iría encantada! No lo dudes.

- Está bien, paso a las 7 a buscarte. Ah y por cierto, no hace falta que te arregles mucho, siempre vas muy guapa.

Y dicho esto, deja marcharla.

lunes, 22 de marzo de 2010

Capítulo 3.

Capítulo 3. Entablando amistades


Se escuchó un agudo timbre; era el despertador…

Anna se levantó rápidamente de la cama, se duchó, se puso la ropa,…y fue a la cocina. Sophie estaba allí con James. El desayuno ya estaba preparado. Unos buenos huevos con bacon, típico desayuno allí, en América. Comió a toda velocidad y salió con la mochila a toda pastilla por la puerta.

-Que tengas un buen día- Dijo Sophie.

James, sin embargo, estaba demasiado ocupado con su periódico como para despedirse de Anna.
El instituto estaba a unas tres manzanas de la casa.
Llego corriendo, debido a la emoción e ilusión que le hacía. Estaba sudando a mares.
Entro en el instituto. Se veían claramente a los típicos grupos o tribus que poblaban aquel edificio. Desde las típicas pijas creídas, pasando por los emos, frikis, macarras, surferos, etc…
Todos y cada uno de ellos echaron una mirada a Anna. Como ella temía, se había convertido en la nueva, en el bicho raro del instituto. Tenía que ganarse una buena fama fuese como fuese.
Entró en su clase, 3º A, que se encontraba en el aula 21.

-OH!!...he aquí a nuestra nueva alumna, es nueva, y ya sabéis como se siente uno al ser nuevo…así que tratadla bien para que se sienta como en casa. Chicos, esta es Anna –Dijo la profesora.

-Encantada- dijo Anna.

-Me llamo Beatriz, pero me puedes llamar Bella -dijo la profesora- Encantada. Siéntese, que vamos a empezar, luego habrá tiempo para presentaciones.
Anna se sentó en su sitio, junto a la ventana, a la izquierda de la clase, en la 3º fila empezando por delante.

Se sentó a la izquierda de una chica. Parecía algo cansada, tenía los ojos rojos y estaba medio dormida.
-Sacad el libro de ciencias, por la página 54, la meiosis y la mitosis. – Dijo la profesora- Lee tú Anna, quiero ver como lo haces.
Anna sacó el libro y comenzó a leer, mientras, su compañera cada vez estaba más atontada,…se quedó dormida, pero nadie se inmutó.

Mientras Anna leía el libro, con la otra mano intentaba espabilar a la chica por debajo de la mesa para que se despertase. Esta se dio cuenta de que algo la tocaba, y reaccionó con una sonrisa que escondió tras el libro que iba leyendo con la mirada.
-Bien, bien…puedes parar de leer; veo que para ser extranjera, entiendes bien el idioma y lo lees a la perfección. Serás una buena estudiante.-dijo orgullosa la profesora, mientras los chicos/as la miraban con algo de desprecio.

Suena la campana. La hora del recreo. Todos salen corriendo al patio.
Anna y la chica que se encontraba a su lado salen las últimas.
Era una chica morena, delgada, guapísima, de ojos verdes y una altura más o menos similar a la de Anna. Tenía una cara algo redonda, en la que se podían ver unos pocos granos dispersados, que eran tapados por el color oscuro de su piel. Vestía a lo surfero, con un bañador, y una camisa de billabong blanca que hacía contraste con su color de piel. Llevaba una gran cantidad de pulseras en las manos, y dos preciosos pendientes de perlas, uno en cada oreja.
La chica se dirige a Anna:

-Gracias por lo de antes, ayer estuve en una fiesta, y no dormí en toda la noche. Me llamo Ruby, y tú Anna, ¿no? Encantada. Ven conmigo, y te presento al resto del grupo.

-Gracias Ruby, encantada. ¿Eres de aquí?

-Sí. Por suerte o por desgracia llevo toda mi vida en esta ciudad. No me aburro, pero quiero salir; me encantaría ver mundo. ¿Y tú?, no eres de aquí…Mm...no me suena haberte visto antes.

-Vivía en Italia, pero hace un mes mis padres murieron y me vine a vivir con mis tíos aquí.

-Oh…lo siento por lo de tus padres…ya verás cómo entre mis amigos y yo te animamos. ¡Ya verás la de fiestas que nos vamos a tirar Anna!-Dijo Ruby, riéndose y muy segura de sus palabras-

-Jajaja…!eso espero Ruby!...eso espero…

Y las dos salieron al patio juntas.
Era un patio muy grande. Con una cancha de baloncesto, un campo de fútbol, otro de fútbol americano, una pista de tenis. Y merenderos en la zona con vistas a la playa.
Ruby cogió a Anna de la mano y la llevó hasta uno de los merenderos.
Allí se encontraban 2 chicos y 2 chicas sentados formando un cuadrado alrededor de la mesa, como si de una reunión se tratase.

-¡Hola chicos! ¡Os presento a Anna!, es nueva en el instituto y llego hace un mes a la ciudad. No conoce aún a nadie de por aquí. –Mientras hablaba cogió a Anna de la mano y la acercó a los chicos.

Uno de ellos se levantó:

-¡Hola!, ¡encantado Anna!, me llamo Charlie Mathew…pero llámame C.M…-dijo el chico, con una bonita sonrisa que dejaba ver unos blanquísimos dientes-

-¡Encantada!

Se levantó el otro:

-¡Ah!, ¡pero si habla y todo!...jajaja…!Encantado Anna!, ¡me llamo Eddie!, pero para acortar, llámame Ed.

-Jajaja…que simpático, ¡me caes bien Ed! (mientras, CM miraba a Eddie con cara de desprecio), encantada de conocerte!!

-Y ahora las chicas – Dijo Ruby- Esa chica rubia que está sentada a la izquierda de Ed se llama
Sandra, es un nombre español, creo, ¿no?

La chica se levanta:

-Sí, mis padres y mi hermano son de España, ya sabéis…flamenco, olé, paella, etc… jajaja. Yo nací aquí. Mucho gusto Anna!

Se acerca a Anna y le da dos besos.

-Y por último- Se acerca a la oreja de Anna y le susurra- la pija del grupo. Sasha!

Le saluda con la mano desde la silla con cara de pocos amigos:

-¡Encantada!

Ruby suspira:

-¡Bueno!, ¡pues esta es mi pandilla!, ¡espero que te sientas como en casa Anna!

Toca la sirena. Todos entran en sus clases.

-¡Espérame un momento Anna!, voy a beber agua a la fuente antes de entrar- grita Ruby mientras se va alejando.

Anna se queda sola.
Un chico se acerca rápidamente, viene con prisa y mientras corre se choca con Anna, que estaba despistada. Todos los cuadernos que llevaba quedan esparcidos por el suelo. Anna le ayuda a recogerlos.

-¡Perdona!, soy un torpe, ¡lo siento! y ¡gracias! ¿Tú no eres la nueva?

- Sí, lo soy. Valla, no sabía que la noticia se hubiera expandido tan rápido.-Dice Anna ruborizada.

- Sí, jaja suele pasar. No es muy común que llegue alguien nuevo a este colegio. Digamos, que no es que tengamos muy buena fama. Bueno me voy que llego tarde y tengo biología.- Sale corriendo a toda velocidad mientras lo chilla para que ella sea capaz de escucharlo.

Cuando llega a clase, se da cuenta de que lleva un cuaderno en la mano izquierda. “Valla! Se me ha olvidado devolvérselo” se dice a sí mismo Anna.
Inglés. Communication and culture. Qué larga se le ha hecho la hora, la profesora, Catherine, no ha dejado de hablar ni un solo momento, ¡creo que ni hasta para respirar! ¿No se ahogará? Rubby y ella, se han puesto a dibujar el mar, la playa, las montañas pero…

-Hey chicas, ¿Estáis atentas?

-Sí, sí lo estamos.-Responde Rubby un poco desconcertada.

-Llevo un buen rato insistiendo para que me respondáis a la pregunta pero no me hacéis ni caso, ¿Se puede saber que os pasa?

-Lo sentimos cathy, es que ya he dado este tema hace bastante y me aburro un poco.-Contesta Anna.

-Bien, serías capaz de pasarme una frase en activa a pasiva? They give information in the shop.

-Sí, claro. Information is given in the shop.

-Muy bien Anna-Suena el timbre para ir a casa.-Quiero que me paséis las frases del ejercicio 10 página 136 para mañana sin falta.

miércoles, 16 de diciembre de 2009

Capítulo 2

Capítulo 2. Diario de una nueva vida


-5 DÍAS DESPUÉS-

03/02/2009

Me siento fatal. No paro de pensar en la reciente muerte de mis padres. Inconscientemente me vienen a la cabeza recuerdos de ellos, de lo que vivimos en el pasado. Eran lo único que tenía, y ahora, estoy sola, no tengo a nadie.

Ayer llegué a California. El sitio es precioso. La casa es muy grande y acogedora. Y mi tía Sophie es una gran persona, desde el primer día ya me ha resultado muy agradable. En cambio, James, es tan raro. desde que estoy aquí, lo he visto en contadas ocasiones. Al parecer pasa poco tiempo en casa debido a múltiples viajes de negocios.

El idioma lo tengo más que aprendido gracias a mi abuela, que me enseñó inglés desde pequeñita. me encantaría volver a verla otra vez; que me sentase en sus regazos, me hiciese el caballito mientras me cantase una canción. Que tiempos...

Me ha dicho mi tía Sophie que en marzo empezaré a ir al instituto.

¿Les caeré bien a todos?
¿Haré muchos amigos?
Espero ansiosa ese día...


10/02/2009

Salgo poco de casa. Sigo casi igual; el recuerdo de mis padres no se borra de mi cabeza.

Hoy fui a dar un paseo por la ciudad con Sophie. Es una ciudad muy playera. Casi toda la gente está siempre en la playa. hay surferos por todas partes. Está todo tan animado. En el centro del pueblo, se encuentra la zona comercial, en la que puedes encontrar todo lo que te imagines.+

buff...cuanta ropa...

Cuando mejore, allí pasaré días y días. Además, también está lleno de discotecas y zonas de marcha. Es una ciudad increíble. Me estoy empezando a enamorar de este sitio.


16/02/2009


Hoy he salido sola por primera vez.

He visitado sitios nuevos de la ciudad, pero sin alejarme mucho de casa.


He encontrado un sitio precioso. Un mirador increíble desde el que se ve el mar y un precioso castillo que se encuentra en una islita a menos de 1 km de la playa.

La gente me miraba de una forma extraña, quizás por el color de mi piel, demasiado blanca... ya que aquí todo el mundo está moreno. Me miran como un bicho raro. voy a tener que empezar a entablar amistades aquí, o si no, me verán como una loca o así, ja ja ja. bueno, aunque un poco loca si que estoy...


22/02/2009


No sé porque, pero hoy me desperté alegre. con ganas de volver a vivir la vida. Algo raro en mi, y más raro, después de los últimos sucesos.

Fui con Sophie al instituto a hablar con la directora que ya sabía todo lo ocurrido, ya que es íntima amiga de mi Tía. Los chicos/as del instituto me miraban, algo típico, ya que ahora soy la nueva. Hasta que no se aconstumbren a mí, seré algo así, como la rarita del instituto o la extrangera que nadie conoce.
Justo el día 1 de marzo empezaré con las clases. Me hace muchísima ilusión. ¡Ya falta menos!

30/02/2009

Hoy hace ya un mes de lo ocurrido. Estoy un poco más animada, pero no va a ser fácil superarlo. A veces los recuerdo, me angustio, lloro,... Y me falta el oxígeno... Y hasta hay veces en las que me desmayo. Pero poco a poco espero ir superando este bache. Esta noche los recuerdo mucho.
Me acuerdo de cuando mi madre me llevava a la playa en autobús, porque mi padre casi siempre estaba trabajando. Pasábamos horas y horas. Luego nos comíamos un helado en el bar que daba a la playa, mientras escuchábamos el ruido de las olas y las gaviotas que sobrevolaban sobre nuestras cabezas. Mi padre llegaba por las noche y cuando venía de algún viaje de negocios, nos traía algún regalo. Había días que los pasaba nerviosísima porque venía con un regalo ja ja ja. Siempre lo esperaba en una silla, junto a la puerta, y cuando llegaba, le daba un abrazo fortísimo, y él a mí otro...
Odio acordarme del pasado...
... Pienso que pensar en el pasado, es como correr tras el viento
...pensar en algo que no volverá a existir, que no volveré a sentir...

martes, 1 de diciembre de 2009

Capítulo 1


Capítulo 1. Sucesos extraños



Era una noche oscura y gélida de invierno, las estrellas brillaban en el cielo como nunca, faltaba poco para la medianoche. El suave susurro del viento rompía con el monótono silencio que se paseaba por las desiertas calles de una pequeña ciudad de la costa Mediterránea Italiana.

Un matrimonio dormía plácidamente en una de las casas más cercanas al puerto. En la habitación solo se escuchaba el débil crepitar del fuego de la chimenea, que aún ardía, aunque débilmente, con unas pequeñas pero potentes llamas vacilantes.

Era una casa inmensa y preciosa; tenían un gran jardín que la rodeaba, y desde fuera se podía ver un bonito porche, decorado con una gran cantidad de flores que le daban un toque alegre y rústico a la casa

En otra de las habitaciones de la casa, se encontraba la hija del matrimonio, una chica de unso 13 años, alta y delgada, pelo rubio y ojos marrones. Tenía una bonita cara, ovalada, con unos graciosos y simpáticos mofletes y unas pocas pecas repartidas por toda la cara,q ue le daban a esta, un toque original. Se llamaba Anna.

Anna no habia podido conciliar el sueño aún. Al día siguiente tenía un examen, e inconscientemente, en su cabeza, letras y palabras no paraban de bailar haciéndole imposible el sueño.

" Funciones, logaritmos, ecuaciones, límites, polígonos,...¡¡Ah!! ¡Odio las matemáticas!"

Pego un salto de la cama y fue diréctamente al cuarto de baño. Se mojó varias veces la cara para despejarse un poco. Bajó a la cocina y fue al frigorífico, lo abrió, y cojió una botella de agua. Rápida y silenciosamente salió del interior de la vivienda al porche y se tumbó en una de las hamacas, mientras
con la otra mano se echaba agua de la botella en un vaso.

Allí se sentía más relajada, aunque estaba congelada, ya que la suave brisa le calaba hasta los huesos debido al frío que hacia.

Se escuchó el ruido de un coche en la cercanía. A ella le extrañó, ya que era tarde, y pocos coches pasaban por delante de su casa, debido a que ella vivía en el puerto y solo solían pasar los coches de las personas residentes allí.

El coche se acercaba cada vez más, y más....

Ya se veía al final de la calle, era un coche negro y lujoso, con las ventanas tintadas.

El coche paró justo enfrente de la casa: salieron dos hombres vestidos de negro. Y, debido a la oscuridad, sus rostros eran imposibles de ver.

Anna entró rápidamente en al casa y cerró con llave. Estaba un poco nerviosa. Subió a su habitación y se echó las sábanas por encima, como si la fuesen a proteger de todo peligro.

Otra vez, el silencio inundó la casa, el fuego de la chimenea de la habitación del matrimonio, se había extingido, y ellos dormían tranquilamente.

Pasaron unas horas, y Anna ya estaba dormida. Sus padres, se habían levantado, ya que la madre de Anna, estaba embarzada, y sentía unas grandes náuseas, que le hacían imposible el sueño. Había dejado un gran charco de sangre en la cama, y estaba asustada, ya que creía que habái perdido al bebe.

Se vistieron rápidamente y salieron de casa. cerraron la puerta con llave y fueron hacia el hospital más cercano andando, ya que se encontraba a pocos metros.

- Tranquila, ya verás como todo sale bien.-decía el padre una y otra vez...

. . .

Eran las ocho de la mañana. Anna se despertó para ir al instituto un día más. Y como siempre, la misma rutina. Se pegó una ducha, hizo su cama y se vistió. Las luces del crepúsculo todabía entraban por las ventanas de la casa, dándole a las habitaciones un toque rojizo anaranjado.

Anna bajó a la cocina. Se extrañó, ya que no escuchaba a sus padres, y tampoco estaban desayunando.


Qué raro...si mi padre tiene que entrar a trabajar a las nueve, ¿cómo es que todabía no se ha despertado?-se dijo a sí misma.

Subió la habitación de sus padres, y, al ver el charco de sangre que su madre dejo esa noche, quedó horrorizada. No dejaba de mirar, anonadada, esa escena. cuando reaccionó, bajó rápidamente a la entrada de la casa, y abrió la puerta para acceder al porche. Salió corriendo a buscar ayuda, pero, al bajar las escaleras del porche que dan al jardín, resbaló, y calló al suelo. Tumbada, boca abajo, y con más de una herida, miró al frente desde el suelo. Y cuál fue su asombro, al ver a sus padres bajo las escaleras del porche, con un color pálido y llenos de polvo.

La madre estaba tumbada en los regzos del poadre. no se movía. El padre era portador de una pequeña arma blanca, que parecía una navaja. Estaba blanquísimo y temblaba mintras miraba fijamente a Anna. No reaccionaba, no hablaba, parecía que se había quedado mudo. Él intentó levantarse, y la madre calló de sus regazos, quedando boca abajo en el suelo.

Anna al ver la espalda e su madre, se echó a llorar. tenía tal cantidad de puñaladas, que no se podían contar. Anna no cesaba de llorar, le faltaba el aire. Se empezó a marear y tiritar. De repente, se desvaneció en el suelo.

... las pulsaciones empezaron a aumentar

Anna se despertó en el hosptal. Estaba cubierta de cables y toda clase de aparatos electrónicos que la agobaban. Estaba muy nerviosa.

A su lado se encontraba una enfermera, un obeso policia de piel oscura y un hombre con una chaqueta negra, que le resultaba muy familiar. Anna se acordó de los hombres que vio esa noche. iró fíjamente al hombre de negro, y lo señaló.

-Él, ha sido él. ¡Él ha matado a mi madre!-Gritó amenazante.- Lo vi. Esta noche merodeando por los alrededores de mi casa con otro hombre.

El hombre de negro soltó una leve carcajada irónica y respondió.

- Anna, te conozco desde que eras una enana, a ti y a tus padres. Puede que no me recuerdes, pero soy el hermano de tu padre, James, tu tío. Llegué ayer por la noche con un viejo amigo de tu padre, veníamos a haceros una visita, pero debido a lo tarde que era no encontramos ningún hotel y no nos queríamos presentar tan tarde en vuestra casa, sería demasiado informal.

Anna nunca había oído hablar de la presencia de ese nombre en la familia, pero lo reconoció como el hermanoe su padre, ya que eran casi iguales.

El obeso policía se acercó a Anna:

- Dice la verdad, si no hubiese sido gracias a él, ahora no estarías aquí, él fue a persona que te encontró tirada en el suelo, y que encontró.... el cadaver de tu madre.

- ¡Yo la vi con mis propios ojos!, pero, ¿Quién ha sido?, ¿Quién lo ha echo? dígamelo ¡por favor!-Dijo Anna, angustiada y nerviosa.

-Según los últimos informes de la policía científica, hemos afirmado que el asesino fue...-SDe quedó callad un momento.-...tu padre...

Anna se quedó petrificada por un momento.

-¡No puede ser, es imposible!- gritaba Anna desconsolada.

-Tenemos varios testigos que han afirmado ver a tu padre con tu madre minutos antes del momento del asesinato. Además, las huellas de la navaja que encontramos esta mañana en la entrada de tu casa coinciden con las de tu padre. también hemos encontrado sangre en el cuarto de tus apdres, pero parece ser que fue causado por algo natural, imaginamos que de un embarazo.

-Pero, ¡es imposible! y mi padre, ¿Dónde está?

-Tu padre huyó de la escena del crimen y, según los tripulantes de un barco pesquero, lo vieron tirase al mar. intentaron salvarle, pero no puedieron yaque la corriente era demasiado fuerte. Al parecer, por lo que nos contaron, la corriente se lo llevó mar adentro y desapareció bajo el agua.

Anna se echó a llorar. La enfermera le ofreció una tila para que se relajase. Se la tomó, respiró hondo. No creía lo que estaba sucediendo,era imposible.

James, el tío de Anna, se acercó a ella:

- No te preocupes Anna, no te quedarás sola. Te vendrás a vivir a América conmigo y tu tía Sophie. Al fin y al cabo, ahora soy tu tutor, y tengo la obligación de cuidarte. Serás como la hija que nunca llegué a tener.

Anna asintió concara de poca confianza. James la agarró de la mano.

- Ya verás cómo volverás a ser tan feliz como antes, será como si nada de esto hubiese pasado. Vivirás una nueva vida mucho mejor.-james sonrió-Dentro de tres días cojeremos un avión hacia el sur de California. ya verás como aquello te encantará.

El policía y James abandonaron la sala.

Anna y la enfermera se quedaron en la habitación. Ésta cojió una pequeña inyección y se la inyectó a Anna en el brazo.

-Que duermas bien-dijo la enfermera.

Y Anna cayó rápidamente en un profundo sueño.

Sipnosis

Anna, una joven de 13 años, ve cómo pasa en unos pocos segundos la vida de sus padres.
A su madre, la han apuñalado varias veces por la espalda, su padre, se ha precipitado al mar, y a causa de la corriente, ha fallecido. Su tío, James, va a recojerla al hospital para llevársela a América, junto a su esposa Sophie.
Allí intentará rehacer su vida junto a sus nuevos amigos y a un nuevo amor., pero... algo se esconde tras todo esto. Algo oscuro y corrupto.
Junto a Scott va descubriendo claves que la conducirán a la verdad de la muerte de sus padres. pero no les resultará tan fácil como ellos pensaban. Las cosas se pondrán muy difíciles.
¿Lo conseguirán?